jueves, 4 de septiembre de 2014

Hic sunt espátulas (y 3): Magister dixit*


Este texto tiene una doble intención. Pero tal como hacemos siempre que utilizamos el título de esta serie de posts, comenzamos dando referencias sobre el estado de los pollos de espátula que están equipados con radiotransmisores.

Y lo primero que deseamos haceros notar, es que a diferencia de los pollos marcados con color rojo en sus alas, los portadores de dispositivos aún no han “saltado” hacia África.

Os recordamos que han sido 6 aves de diferentes colonias, los provistos de ellos. A día de hoy, 4 medran por los humedales del Suroeste ibérico y a 2 los damos por malogrados.

Roche: Este pollo nacido en la salina del Consulado (isla del Trocadero), al norte del saco interno de la bahía de Cádiz, nos tuvo un tiempo expectante por la falta de emisión de datos. Tras recorrer diferentes pantanetas de agua dulce onubenses, ahora está en las salinas de Castro Marín en Portugal.


Roche


Barrosa: Nacido en la isla del Vicario, la mayor parte del tiempo ha estado en los esteros de la salina industrial Santa María, pero antes en las gavias de agua dulce de la marisma Cetina, para en este momento, volver a las marismas del río Guadalete en su tramo jerezano, lugar que también frecuentó y que puede tener una importancia relevante en el desarrollo de las jóvenes espátulas.


Bahía: Nativo de Chiclana, ya que nació en la salina de San Alejandro. Lo vemos todas las mañanas y atardeceres, descansar junto a una decena de adultos en un “muro” de una vieja salina junto al caño de Sancti-Petri.  ¡También grande y lustrosa ¡

 

Odiel: Sigue sin abandonar los seguros y abundantes recursos tróficos en miríada de pozas mareales de la isla de Enmedio -marismas del Odiel-. Es una de las espátulas equipadas con radio-transmisores más inmovilista.


Respecto a Saltés, tras varias e infructuosas búsquedas en la última posición emitida desde la isla de Enmedio, no hallamos al ave ni a su dispositivo. Y en cuanto a Bacuta, tras el entusiasmo que nos propició su desplazamiento a la bahía de Cádiz -nació en el Odiel-, retornó casi de inmediato a las marismas del Rocío. Su última posición la tenemos referenciada entre los pinares de Doñana, muy cerca de la laguna de Santa Olalla. Una de las hipótesis de trabajo es que haya sido depredada.

Finalmente deseamos comentaros también, que ha sido para nosotros un auténtico honor el recibir en la torre del Puerco, la inesperada visita del Prof. Manuel Fernández Cruz (Trujillo 1942, de la benemérita Cátedra de vertebrados de la Universidad Complutense de Madrid y sucesor del Prof. Bernis, ejerció como secretario general de la SEO, además de director del Centro de Migración de Aves) y su esposa. Alguna vez dijimos ya (post 29/08/13), que es “padre” de la ciencia de la migratología en España; y lo es especialmente “de las manos” (mejor léase alas) de las cigüeñas blancas. Sin lugar a dudas, la especie más paradigmática del conocimiento existente sobre las migraciones o “mudanzas de animales” en la cultura popular. Incluso en la Biblia encontramos citas como la de Jeremías “Hasta la cigüeña en el cielo conoce sus migraciones, la tórtola, las golondrinas y las grullas tienen en cuenta el tiempo de sus migraciones”.


Don Manuel y las cigüeñas en especial forman un binomio inseparable en el acervo colectivo de la ornitología del Estrecho de Gibraltar, ya que fue el primer responsable de los estudios de este tremendo colector de aves de Europa en tránsito hacia África.


Así que imaginad nuestra satisfacción por compartir junto a él unas horas en la torre. E inmensa cuando pudo ver pasar un bando de espátulas sobre la línea de marea tras recorrer toda la playa dirigiéndose hacia África y…

* “Aquí hay espátulas” : Dijo el Maestro **.

(**) Tómese si se desea por un aforismo

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